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DAKHLA, MOROCCO 2 ª Parte
Hoy nos trasladamos al extremo sur de Marruecos, al corazón del Sáhara marroquí, para descubrir Dakhla, una joya emergente que está conquistando a los viajeros más exigentes. Situada entre el océano Atlántico y las vastas dunas del desierto, Dakhla es una ciudad mágica donde la naturaleza muestra su dualidad más sorprendente. Este contraste entre el desierto dorado y las aguas cristalinas del Atlántico crea paisajes únicos que no se encuentran en ningún otro lugar del mundo. Aquí, los amaneceres y puestas de sol son verdaderas obras de arte, con colores cálidos que pintan el cielo y se reflejan tanto en la arena como en el agua. Dakhla es conocida como un destino emergente con un enorme potencial para convertirse en la perla del turismo marroquí en los próximos años. Su oferta turística es tan diversa como atractiva. La laguna de Dakhla, protegida por una península, se ha convertido en un paraíso para los amantes de los deportes acuáticos, especialmente el kitesurf, gracias a sus condiciones perfectas de viento y agua durante todo el año. Este lugar atrae tanto a principiantes como a profesionales de todo el mundo. Pero Dakhla no solo vive del mar. Entre sus atractivos naturales destaca la Duna Blanca, una enorme formación de arena blanca que emerge del agua y ofrece vistas espectaculares. Cerca de allí, encontramos la Isla del Dragón, un lugar casi místico que se puede explorar a pie durante la marea baja o en barco. Esta isla es famosa por su arcilla blanca, utilizada en tratamientos naturales para la piel. Es, literalmente, un spa al aire libre en pleno desierto.Fernando Valmaseda, David Bigorra y Cristina Lozano