En este capítulo se explora la importancia de estar presente y consciente de nuestro cuerpo en el momento presente. Se invita a prestar atención a las sensaciones físicas y emocionales que experimenta, sin juzgarlas ni tratar de cambiarlas. A través de ejercicios simples de respiración y meditación, se busca desarrollar una mayor conexión con el cuerpo y cultivar una actitud de aceptación y compasión hacia uno mismo.