Glovo ha anunciado que cambia su modelo de negocio de "falsos autónomos" y meterá en nómina a todos sus repartidores. La medida, que llega con el objetivo de "evitar la incertidumbre regulatoria", va a tener un coste de 100 millones de dólares anuales y de hasta 770 millones de euros pendientes en pagos a Seguridad Social, multas y regularizaciones. Charlamos con los riders y escuchamos a los gigantes del 'delivery' en Hora 25 de los Negocios.