Las primeras personas que despertaron en masa fueron, contra todo pronóstico, las más jóvenes. La educación en casa se invirtió. Lxs peques enseñaron a lxs adultxs el Menos es Más y que el Decrecimiento era el camino. No fue fácil ni rápido, lxs adultxs pasaron por una segunda edad del pavo o rebeldía adolescente, la famosa resistencia al cambio. Pero cuando quedó claro que era Adaptarse o Morir, apostamos por la Vida, que durante tanto tiempo maltratamos, y ésta empezó a regenerar el planeta que estuvimos a punto de matar.