El 5 de junio se cumplen 125 años del nacimiento del poeta español más leído de todos los tiempos. Y capaz de inspirar, como pocos, a otros tantos genios de la prosa y el verso. Nos mostró la tragedia de un ser humano que no puede vivir la vida que quiere. E hizo de ella una constante en toda su obra. Convirtiéndola en universal.
Un aniversario que llega cuando son, cada vez más, quienes creen que, a veces, no hay que inventar mucho más. Que basta con beber de las raíces de lo que otros nos han dejado. Por eso, cada generación ha tenido el suyo. Ya sea a través del arte, de la música o de la literatura. Porque Andalucía vive un resurgir cultural que bebe de sus raíces. Y su figura… parece más viva que nunca.
Hoy podemos decir que el ‘maná’ de Federico García Lorca no se ha secado. Y cuando la tercera generación del andalucismo reivindica sus símbolos y su identidad, encuentra en él a un icono con una fuerza arrolladora.
La última entrega de ‘Hablando en andaluz’, que parafraseando a Machado lleva el título de ‘El andalucismo de Federico que no seca el tiempo’, profundiza en la figura del poeta como integrante, junto con Blas Infante, de la primera generación del andalucismo.
Además, y con la profesora de Lengua y Literatura española, Mila Miranda, licenciada en Filosofía y Letras, Filología Hispánica, analiza las claves que hacen de García Lorca un símbolo identitario de los andaluces de hoy.
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