¿Qué estamos dispuestos a sacrificar, exactamente… el reparto anual de dividendos de las opulentas industrias alimentarias y la comodidad de nuestros dirigentes (y de las afortunadas clases privilegiadas), que (sospecho) seguirán comiendo todo lo que les plazca y yendo a la peluquería en coche (o en avión)… o vamos a sacrificar solo la salud y el futuro de aquellos que no podrán permitirse comprar carne de calidad, aunque trabajen toda una vida, de sol a sol, para llegar con serias dificultades a fin de mes?
Las referencias están en https://keto-coach.es/ketofilia
¡Aúpa keto!